Sendas Zen del Toro

Sabiendo como sabe su origen oriental, DAVIDJESUS tramita su otra vida por ahora a la vera del Camino de Santiago en esta tierra del toro, que es Espa?a, yendo y viniendo por las Sendas de Oku, y sumido siempre y del todo en el Zen, principio y fin de su meditaci?n trascendental. Escribe un libro al dictado de su visi?n-pasi?n del toreo en todas sus vertientes, y lo hace con dos claves, la del soneto y la del haiku, a fin de sumar arte y sabidur?a en la sutil estructura de unos versos (14+3) por lo com?n.Este libro no es una enciclopedia, tampoco es un manual, ni siquiera un bosquejo de apuntes para aficionados al toro y a los toreros. Se trata de algo diferente: un breviario de emociones y pasiones personales tenidas al borde del estribo y con la mente puesta en otros cielos. Seguramente, esta connotaci?n -la de irse lejos sin salirse del ruedo- es la que confiere singular valor, extra?a belleza y alto rango espiritual a estas letras.Hay algo m?stico en todas estas l?neas -toreo zen, quiz?- que traspasa y engalana a?n m?s la segura y maestra proporci?n de la medida de estos versos, y es la escala ?ptima de la pulcritud en todas las miradas del toreo.